CON UN 50% MENOS DE PRESUPUESTO, EL EQUIPO DE GOBIERNO DE IU., ORGANIZA UNA MAGNIFICA FERIA.

     No estaba el tiempo para bollos  y el equipo de gobierno de IU, y en especial, su
concejala de festejos, metió la tijera en la programación (revista, orquestas, retama…). Un 50% menos del presupuesto. Y este recorte tan brutal, no ha supuesto que no tengamos un Feria encomiable y digna,  gracias al trabajo de unos dirigentes políticos y de unos trabajadores  municipales  que con su dedicación  y esmero han estado detrás de cada detalle para que no falte nada (regando pistas, recogiendo basuras, encendido de luminarias…).

     Los vecinos y paisanos de la comarca han llenado todas las noches la Caseta  Municipal,  han venido más tiendas  y atracciones feriales que nunca y si no hubiese sido  por la asfixiante y violenta ola de  calor que nos invadió el viernes y el sábado, junto con esa extraña, incongruente y poco villaraltera  manía de irse a comer a Alcaracejos ( ¡Vaya manera de darle trabajo a los nuestros! En las terrazas y locales acondicionados había sitio para ellos y medio Alcaracejos. No hay excusa. Y si desterrar para siempre ese dicho  ruin y  maléfico: “es cosa de villaralteros”. Estas circunstancias han deslucido la Feria de mediodía.)

     Mientras la oposición (el PP se fue de vacaciones y no tiene que ver nada en este entierro) a lo suyo. Ni en las Fiestas descansan. Política basura, interesada, engañando y manipulando, pues no publican la otra parte de la historia, y todo por unos floripondios literarios (fg. Flor grande que suele figurar en cacharros de mal gusto) que no se publican en la Revista de  Feria. L a culpa no es del PSOE, ni de Funes _magnífico trabajo literario_ que lo ha utilizado como a un mirlo, sino de cierto miembro del Psoe con aspiraciones literarias. Le está haciendo mucho daño al Grupo Socialista de Villaralto.

     Como dato negativo, la escasa asistencia de niños y jóvenes a la procesión de nuestra Patrona, la virgen del Buen Suceso. Así, no se mantienen las tradiciones ni conservamos nuestras raíces para crecer en los valores que  heredamos de nuestros antepasados,  dándoles fuerza y vida a nuestras señas de identidad como villaralteros  y villaralteras.